Flores de Femicidio es un monumento permanente de Natali Bravo-Barbee para las mujeres asesinadas por hombres en su país natal Argentina. Solo en Argentina hubieron 327 feminicidios en 2019.
 
Ella comienza investigando las historias de cada mujer y reuniendo un archivo para cada víctima que incluye historias de medios y rastros encontrados en las redes sociales. Con una comprensión de la historia de cada mujer, Bravo-Barbee luego elabora a mano una flor de cianotipo 3D única utilizando un proceso sin cámara que incorpora imágenes de sombras de encajes, flores y otra vegetación.
 
Completa cada flor lleva adjuntando una etiqueta colgante con el nombre de cada víctima, honrando a la mujer y recordando la antigua tradición de colocar flores en la tumba de los muertos. Cada flor puede tardar por lo menos 10 horas en completar. Las flores sirven como una manifestación física de cada mujer perdida y reflejan la enorme escala de la pérdida.
 
Bravo-Barbee: “Cuando alguien dice 327, eso es solo un número que uno puede o no puede imaginarse. He construido estas flores de cianotipo como una representación de cada mujer. Cuando uno se para en un cuarto con todas estas flores, la abrumadora cantidad de ellas tiene un impacto cuando una vida, una persona, una mujer se asocia con cada una ... En los Estados Unidos, los medios de comunicación no han adoptado el uso del término 'feminicidio' para describir los delitos de género contra las mujeres. Si lo hicieran, se haría evidente cuán problemáticos son problemas sociales en las comunidades individuales ".
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Flores de Femicidio es el monumento permanente de Natali Bravo-Barbee para las mujeres asesinadas por hombres en su Argentina natal. Solo en Argentina hubo 327 feminicidios en 2019. Ella comienza investigando la historia de cada mujer y reuniendo un archivo para cada víctima que incluye historias de medios y rastros encontrados en las redes sociales.

Con una comprensión de la historia de cada mujer, Bravo-Barbee luego elabora a mano una flor de cianotipo 3D única utilizando un proceso sin cámara que incorpora imágenes de sombras de encaje, flores y otra vegetación. Ella completa cada uno adjuntando una etiqueta colgante con el nombre de cada víctima, honrando a la mujer y recordando la antigua tradición de colocar flores en la tumba de los muertos. Cada flor puede tardar hasta 10 horas en completarse.

Las flores sirven como una manifestación física de cada mujer perdida y reflejan la enorme escala de la pérdida. 

Bravo-Barbee:

“Cuando alguien dice 327, ese es solo un número que uno puede o no puede imaginar. He construido estas flores de cianotipo como una representación de cada mujer. Cuando uno se para en una habitación con todas estas flores, la abrumadora cantidad de ellas tiene un impacto cuando una vida, una persona, una mujer se asocia con cada una ... En los Estados Unidos, los medios de comunicación no han adoptado el uso del término ' feminicidio 'para describir los delitos de género contra las mujeres. Si lo hicieran, se haría evidente cuán problemáticos son estos problemas sociales en las comunidades individuales ".